¿Qué son los antidepresivos?

Los antidepresivos son una clase de medicamentos diseñados para aliviar la depresión. Lo hacen restaurando el equilibrio entre neurotransmisores, productos químicos en su cerebro que regulan la emoción.

Si bien muchos antidepresivos pueden ser efectivos, algunas personas pueden experimentar efectos secundarios. Si cree que está experimentando alguno, hable con su médico.

Cambios de humor

Los antidepresivos trabajan regulando los niveles de neurotransmisores en el cerebro, como la serotonina, la dopamina y la noradrenalina.

El trastorno bipolar se puede tratar con antidepresivos y estabilizadores del estado de ánimo. Puede ser necesaria una combinación de ambos para lograr un alivio total.

El ISRS y los SNRI (inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina) funcionan bloqueando la absorción de serotonina y noradrenalina del cerebro, lo que aumenta sus niveles en el cuerpo.

Estos medicamentos pueden ser efectivos, pero pueden causar efectos secundarios como agitación, confusión, frecuencia cardíaca rápida y presión arterial alta. Además, pueden conducir al síndrome de serotonina.

Si está tomando un antidepresivo, asegúrese de monitorear su dosis y consultar con su médico periódicamente. Pueden ajustarlo según sea necesario para que sea más efectivo para usted.

Al suspender un antidepresivo, es esencial reducir la dosis gradualmente para minimizar los síntomas de abstinencia. Estos pueden ser especialmente intensos si cesas abruptamente el tratamiento.

Insomnio

El insomnio es un problema generalizado para muchas personas, y las trastornos del sueño pueden exacerbar los síntomas de depresión. Como también es un mayor factor de riesgo para los intentos de suicidio, se ha prescrito los antidepresivos para ayudar a las personas a dormir más bien las noches.

El doctor W. Chris Winter, M.D., un médico y neurólogo de medicina para el sueño certificada por la junta, explica que muchos medicamentos afectan a los neurotransmisores serotonina, dopamina y noradrenalina, que son vitales para controlar su estado de ánimo. Según la experiencia del Dr. Winter en la regulación del estado de ánimo, tomar estos medicamentos puede causar reacciones adversas, como dolores de cabeza o ataques de ansiedad.

Estas drogas pueden inhibir el sueño REM y prolongar el tiempo que lleva llegar a esta etapa del ciclo del sueño, lo que lleva a un sueño fragmentado o interrumpido, lo que puede conducir a pesadillas.

La mayoría de las personas no experimentan pesadillas mientras toman un antidepresivo, pero aquellos que lo hacen pueden encontrar sus sueños más vívidos y duraderos. Si esto se le ocurre, es importante hablar con su médico sobre sus síntomas.

Aumento de peso

El aumento de peso es un efecto secundario común de los antidepresivos. No solo puede interferir con sus esfuerzos para eliminar libras, sino que también puede hacer que se sienta lento y agotado.

El aumento de peso puede ocurrir por varias razones cuando se toman un antidepresivo, incluido el medicamento en sí, los hábitos de estilo de vida y otras afecciones médicas. Además, el aumento de la grasa corporal generalmente está vinculada a la obesidad, lo que aumenta su riesgo de enfermedad cardíaca y diabetes.

Los antidepresivos pueden conducir a un aumento de peso, pero no es necesario ser una causa de alarma. Comer una dieta equilibrada y nutritiva con productos frescos como frutas y verduras, fuentes magras de proteínas y lácteos bajos en grasa es la mejor manera de manejar el peso de manera efectiva.

Pensamientos suicidas

Las personas que toman antidepresivos pueden experimentar más pensamientos o intentos de suicidio. Si bien estos sentimientos y pensamientos pueden ser menos graves en algunas personas, aún requieren tratamiento para aliviarlos de manera efectiva.

Un estudio reveló que las personas que toman inhibidor selectivo de la recaptación de serotonina (ISRS) y otros antidepresivos experimentaron pensamientos y violencia más suicidas que aquellos sin estas drogas. Esto podría deberse a cómo estas drogas alteran los productos químicos cerebrales, según los investigadores.

Los ISRS y otros antidepresivos pueden causar efectos secundarios como náuseas, inquietud, aumento o pérdida de peso, temblores, boca seca, sudoración, mareos, dolores de cabeza, insomnio, fatiga y diarrea. Además, tomar estos medicamentos durante un período prolongado de tiempo podría aumentar el riesgo de desarrollar caries dental.

Al tomar antidepresivos, hay varias formas de reducir su riesgo de pensamientos y comportamientos suicidas. Estos incluyen recibir apoyo de familiares y amigos, hablar con su médico y buscar un terapeuta o consejero para obtener apoyo adicional.