Pinceladas sobre el trauma

El trauma puede tener un profundo efecto sobre cómo interactuamos con las personas y nuestras relaciones, para bien o para mal. El trauma puede ser un incidente aislado o podría ser parte de un patrón continuo que se desarrolla con el tiempo.

Cada persona responde de manera diferente a los eventos traumáticos, que pueden tener profundos efectos en nuestras relaciones, confianza y sentido de seguridad general.

Se puede escenificar en tres patrones que suelen ser comunes y generales en muchas consultas de terapia.

Estrés

Las personas que han sufrido un trauma, particularmente eventos importantes en sus vidas, tienen más riesgo de desarrollar un trastorno de estrés postraumático (TEPT). Desafortunadamente, el TEPT es una condición incurable que puede afectar negativamente las actividades diarias.

Para aquellos que sufren de TEPT, es esencial buscar ayuda y apoyo lo antes posible después del evento para evitar una mayor interrupción en su vida. Esto podría incluir hablar con su pareja sobre el evento traumático y encontrar formas de hacer frente a él.

Sin embargo, los investigadores han observado que ciertos estresores son más traumáticos que otros debido a que su dificultad se controla. Como tal, pueden provocar ansiedad, entumecimiento o flashbacks para las personas.

Ansiedad

Después de experimentar un evento traumático, algunas personas pueden sufrir un trastorno de estrés postraumático (TEPT). Los signos y síntomas incluyen flashbacks, pesadillas y problemas de sueño.

El trastorno de estrés postraumático (TEPT) puede dificultar el funcionamiento de la normalidad y tiene el potencial de afectar negativamente las relaciones con las personas que les importa. Muchas personas con TEPT intentarán evitar situaciones que desencadenen recuerdos de su trauma, lo que hace que sea aún más difícil avanzar en la vida.

Los síntomas de TEPT pueden interrumpir sus patrones de sueño y alimentación, lo que dificulta el concentrado en el trabajo o en la escuela. Puede experimentar sensibilidad a ciertos elementos ambientales como sirenas o ruidos fuertes que se cree que provocan recuerdos del evento.

Si te sientes ansioso, pruebas técnicas de atención plena como la meditación de respiración para ayudar a desestresar. También puede ayudar a descansar más y comer comidas nutritivas. La mayoría de las personas se recuperan de sus síntomas después de un tiempo; Sin embargo, si la ansiedad persistente persiste, hable con un proveedor de atención médica sobre cómo obtener opciones de tratamiento.

Depresión

Después de un evento traumático, las personas a menudo experimentan sentimientos intensos como el miedo, la impotencia y el aislamiento. Estos pueden permanecer durante un período prolongado (semanas o meses), lo que lleva a sentimientos de desesperanza y aislamiento que a su vez pueden conducir a la depresión.

Uno de cada 10 adultos en Estados Unidos ha experimentado depresión en algún momento de su vida. La depresión puede ser una grave preocupación de salud mental.

Los eventos traumáticos, como un accidente automovilístico o un ataque, pueden causar un trastorno de estrés postraumático (TEPT). Esta condición se caracteriza por flashbacks, ansiedad y reviviendo una experiencia traumática.

En algunos casos, el TEPT y la depresión pueden coexistir. Cuando esto ocurre, ambos síntomas pueden superponerse y complicar los esfuerzos de tratamiento.

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